Queremos sumarnos al apoyo a la integración social y laboral de las personas con discapacidad auditiva. Para que conozcas todo lo que este colectivo puede ofrecer, a continuación, hemos recopilado algunos breves pero interesantes datos.
¿Qué es una persona sorda?
Una persona sorda es exactamente igual a cualquier otra persona, con la salvedad de no oír. La única diferencia y principal característica de una persona sorda es que su forma de recibir la información es, fundamentalmente, a través del canal visual.
¿Qué NO es una persona sorda?
Una persona sorda NO es sordomuda. Sordomudo es un término peyorativo y, como tal, incorrecto que resulta molesto. Incluso, supone una falta de respeto para las personas sordas al ser recibido como un insulto y prejuicio hacia su persona. Además, la persona sorda puede comunicarse a través de la lengua de signos y también de la lengua oral (en su modalidad, escrita, hablada y cada cual en función de sus habilidades).
Personas sordas, personas diversas…
El colectivo de personas sordas es muy diverso. En esta variedad influyen factores relacionados tanto con el tipo de sordera (momento de aparición, lugar de la lesión, grado de pérdida auditiva), con las formas de comunicación utilizadas (lengua de signos y/o lengua oral), con diversas características individuales (edad, procedencia, uso o no de ayudas técnicas a la audición, etc.) como con el contexto familiar, educativo y social.
Pero, ¿qué tienen en común?
Todas las personas sordas, con indiferencia de su tipo o grado de sordera, su situación individual, y sean o no usuarias de la lengua de signos, tienen en común las barreras de comunicación que se encuentran en su vida cotidiana, y, por ende, en el mundo laboral.
¿QUÉ PUEDE APORTARTE CONTRATAR A PERSONAS SORDAS?
SI CONTRATAS A PERSONAS SORDAS ESTARÁS…
• Apostando por la plena igualdad de oportunidades.
• Conociendo a este colectivo. Contratar a una persona sorda es contratar a una persona con capacidades diversas. No olvides su profesionalidad y dedicación.
• Contribuyendo en la inclusión laboral del colectivo sordo.
• Cumpliendo con la Responsabilidad Social Corporativa a partir del conocimiento de las personas sordas y sus demandas.
Y ¿por qué contratar a una persona sorda?
Entre sus muchas y diversas capacidades, las personas sordas destacan en su desempeño laboral por…
• Mayor capacidad de concentración en el trabajo.
• Mayor memoria visual.
• Destreza visual y alta capacidad de observación.
• Excelente habilidad manual y manipulativa.
• Perfiles formativos y laborales diversos.
• Mayor motivación y dedicación, tanto en sus procesos de formación como en el puesto de trabajo. Las dificultades en el acceso al empleo con las que se encuentran, hacen que la persona sorda valore más, y, por tanto, ponga mayor dedicación en aprender y ejercer.
COMUNÍCATE SIN MIEDO. Pero, ¿CÓMO?
• Tocar levemente el hombro (o pierna si está sentado/a) para captar su atención
• No gritar
• Mantener la tranquilidad
• Hablar con un ritmo medio
• Vocalizar correctamente (evitar muecas y exagerada vocalización)
• Utilizar frases cortas (estructuras sencillas y concretas)
• Mirar a los ojos y permanencia del contacto visual
• No obstaculizar la zona de la boca
• Garantizar o facilitar la lectura labial (no girar la cabeza, ni agacharse o voltearse…)
• Gesticular sin exagerar (gestos básicos de uso generalizado)
• Apoyarse en la escritura
• Encender y apagar la luz al entrar a una sala para captar la atención de la persona sorda a la que se quiere dirigir/comunicar
• Aprender lengua de signos.
(Texto completo: CNSE-Confederación Estatal de Personas Sordas.)